La volumetría del local invita a crear un plano elevado de luz cenital que recorre el espacio desde la fachada principal a la fachada posterior del edificio, creando una continuidad en la iluminación. En el interior, paños monocromáticos blancos se encuentran con el paño de madera tras el mostrador y se acentúa este contraste con una textura de secciones semicirculares en la madera. Además, se emplean toques de color, que destacan los elementos menos permanentes como señalética y góndolas centrales.